MI VISITA A BUDAPEST: LA PERLA DEL DANUBIO.

    Budapest siempre había estado en mi lista de ciudades por descubrir, y puedo decir que la experiencia superó todas mis expectativas. Esta ciudad, dividida por el majestuoso río Danubio, combina historia, arquitectura imponente y una energía vibrante que se siente en cada rincón.

PRIMERAS IMPRESIONES:

    Al llegar, lo primero que me sorprendió fue la belleza de sus edificios y la mezcla de estilos: desde el neogótico del Parlamento hasta los baños termales de la época otomana. Budapest tiene esa magia de ciudad antigua con un aire moderno y cosmopolita.

LO QUE MÁS DIFRUTÉ: 

• Un paseo por el Puente de las Cadenas, al atardecer, cuando el cielo se tiñe de tonos rosados y las luces comienzan a reflejarse en el río. De noche las vistas son también preciosas y merece la pena pasear, se llena de jóvenes universitarios y el ambiente es muy bueno.

• El Parlamento Húngaro, uno de los edificios más impresionantes que he visto, tanto de día como iluminado de noche. 

• El Bastión de los Pescadores, con sus torres de cuento y una de las mejores vistas de la ciudad.

 

                                                               

        • Relajarme en las aguas termales: probé los famosos baños Széchenyi, ¡una experiencia única en pleno corazón de la ciudad!

La esencia de Budapest.

    Más allá de los monumentos, lo que más me conquistó fue la atmósfera de la ciudad. Los cafés con encanto, las calles llenas de historia y la calidez de la gente hacen que quieras quedarte más tiempo del planeado. OS RECOMIENDO EL CAFÉ NEW YORK

           

                                                                     

Un destino que recomiendo

    Budapest es una ciudad que lo tiene todo: cultura, relax, buena comida y rincones fotogénicos en cada esquina. Sin duda, es un destino que recomiendo para una escapada inolvidable.

 

CONSEJOS ÚTILES:

• Compra entradas con anticipación para los sitios populares (Parlamento, Széchenyi) para evitar colas.

• Lleva cambio de moneda, o asegúrate que tu tarjeta no tenga muchas comisiones.

• Si te alojas varios días, conviene la tarjeta de transporte o la Budapest Card si vas a visitar muchas atracciones con entrada pagada: ahorras tiempo y dinero.

• Verifica horarios, especialmente de los baños, pues algunos tienen diferencias entre días laborables / fines de semana, o cierre anticipado.  

OUTFITS:

Para mi viaje a Budapest opté por una maleta ligera pero versátil. Llevé tres pantalones clave: dos de vestir en blanco y negro, que combinan con todo, y dos tipo palazzo, uno vaquero y otro en color marfil. Los acompañé con dos blazers en verde y beige, ideales para dar un toque elegante sin perder comodidad, y camisetas básicas en blanco y negro que funcionan como fondo perfecto.

Los accesorios marcaron la diferencia: dos cinturones, un pañuelo y calzado cómodo pero chic —unas deportivas para recorrer la ciudad y unas manoletinas para un aire más sofisticado. Con pocas piezas logré looks variados, prácticos y con estilo para disfrutar al máximo la capital húngara.

Espero os haya gustado este pequeño post, que me lo comentéis y que compartáis conmigo vuestra opinión 💬

By CM.